Definición de Tácita Reconducción
La tácita reconducción es una figura jurídica que se activa al concluir un contrato de alquiler, en la que el inquilino continúa ocupando la propiedad sin una renovación formal del contrato, pero con el consentimiento implícito del propietario.
Requisitos para la Tácita Reconducción
Para que se considere válida la tácita reconducción, deben cumplirse los siguientes criterios:
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Tasación inmobiliaria- Permanencia del inquilino: El inquilino debe permanecer en la vivienda o local comercial durante al menos 15 días después de la finalización oficial del contrato.
- Consentimiento del propietario: Es fundamental que el propietario no manifieste su intención de que el inquilino desaloje el inmueble en ese periodo de 15 días.
- Ausencia de oposición: El propietario no debe haber solicitado la devolución de la propiedad una vez que ha finalizado el contrato de arrendamiento.
- Capacidad jurídica: Ambos, inquilino y propietario, deben tener la capacidad legal necesaria para formalizar un contrato.
Efectos de la Tácita Reconducción
La tácita reconducción tiene consecuencias legales significativas:
- Creación de un nuevo contrato: Se establece un nuevo contrato de alquiler que mantiene las condiciones del anterior, pero con una duración diferente, regulándose por las disposiciones del Código Civil y no por la Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU).
- Extinción de obligaciones de terceros: Cualquier obligación de terceros relacionados con el contrato original, como fiadores, queda extinguida salvo que se haya acordado expresamente su continuidad.
Duración del Nuevo Contrato
La duración de este nuevo contrato variará en función del tipo de inmueble:
- Fincas urbanas: Su duración será equivalente al plazo estipulado en el contrato original.
- Fincas rústicas: La duración corresponderá al tiempo necesario para recoger los frutos generados por la finca durante al menos un año.
Diferencia con la Prórroga
Es importante no confundir la tácita reconducción con la prórroga de un contrato. Las diferencias son las siguientes:
Puede que te interese:Techos verdes- Prórroga: Es un mecanismo que se encuentra previsto por la LAU, que permite una prolongación del contrato original bajo las mismas condiciones.
- Tácita Reconducción: Esto implica la creación de un nuevo contrato, aunque preservando las mismas condiciones que el anterior, rigiéndose por el Código Civil.
Terminación de la Tácita Reconducción
Las partes pueden finalizar la tácita reconducción de dos maneras:
- Comunicación de voluntad: Cualquiera de las partes puede notificar por escrito su intención de no continuar con el contrato, con un preaviso de al menos 15 días.
- Causas legales: Esto incluye situaciones como la venta de la propiedad, la declaración de ruina del inmueble o el fallecimiento del arrendador o arrendatario.
Evitar la Tácita Reconducción
Para prevenir que se active la tácita reconducción, es aconsejable que el propietario envíe un requerimiento fehaciente al inquilino, solicitando la entrega de la posesión del inmueble antes de que transcurra el periodo de 15 días tras la finalización del contrato de alquiler.
Conclusión
La tácita reconducción es una figura jurídica importante en el ámbito de los contratos de alquiler que permite la continuidad de la relación arrendaticia sin una renovación formal. Es esencial que tanto propietarios como inquilinos conozcan sus derechos y obligaciones para evitar malentendidos. Para una gestión adecuada en la administración de fincas y para resolver dudas legales sobre esta materia, se recomienda consultar con un profesional especializado.
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